Criterio del Comité Nacional de Pesca Submarina sobre Parques y Reservas Marinas |
La pesca submarina, de ocio o competición, vive ya sumergida en un cambio de valores en un entorno de sensibilización medio ambiental que envuelve todos los ambitos de actividad, industrial, cívico o deportivo.
La época en que, al volver de pescar, nuestros padres y abuelos eran recibidos en la playa como super héroes, foco de la admiración y objetivos de las cámaras, empieza a estar ya lejana en el recuerdo nostálgico de dos generaciones de pescadores submarinos, que hoy deben reciclarse y adaptarse a este nuevo escenario con leyes más estrictas de nuestro deporte y la progresiva aparición y consolidación de espacios marinos protegidos, con regulaciones variopintas y, en la mayoría de casos discriminatorias, de nuestro querida y poco conocida actividad...
Para empezar, Parques y Reservas Marinas parecen lo mismo, pero no lo son:
Los Parques Naturales que, habitualmente, incluyen espacio marítimo y terrestre, suelen tener como objetivo declarado la protección de la biodiversidad, la sostenibilidad del espacio a proteger y estar propiciados por el Ministerio de Medio Ambiente (aguas exteriores) o por las Consejerías de Medio Ambiente de las CCAA (aguas interiores).
Las Reservas Marinas suelen referirse exclusivamente al espacio marítimo y pueden combinar alternativamente entre sus objetivos la preservación del medio marino y, más frecuentemente, la preservación de los intereses del sector pesquero profesional ("Reservas de Interés Pesquero"). Normalmente son promocionadas y gestionadas por el Ministerio de Agricultura; Pesca y Alimentación (aguas exteriores) o por las Consejerías de Pesca de las CCAA (competentes en aguas interiores).
El espacio marítimo costero está dividido en aguas exteriores e interiores, sin que ello responda a una definición científica o técnica concreta: bajo ese criterio, por ejemplo, el 40% de la isla de Ibiza se considera aguas exteriores y el resto, aguas interiores con la consecuente asunción de competencias para regularlas por una u otra administración.
Para complicarlo un poco más, la UE promociona y financia la creación de espacios protegidos bajo el "paraguas" de la RED NATURA 2000, mapa de espacios protegidos o a proteger marítimos y terrestres, cuyo desarrollo en cada lugar concreto puede implicar la simple protección de una especie de flora o fauna (por ejemplo, la posidonia) o sugerir, a su vez, la creación de un Parque o Reserva.
La realidad de los proyectos de regulación de la pesca en estos espacios, sean Parques o Reservas, es que tiende en casi todos los casos a prohibir o limitar significativamente la pesca submarina mientras permite mayoritariamente las demás modalidades de pesca deportiva, que sulen afectar a las mismas especies y, por supuestísimo la pesca profesional "artesananal" , sin limitación alguna en sus capturas...
También tienden a regular detalladamente el buceo con escafandra, canalizándolo a través de Centros de Buceo y poniendo trabas frecuentes a la práctica libre individual o a través de clubs sin ánimo de lucro, y a olvidar o, incluso, prohibir !!! el buceo en apnea.
La posición de FEDAS al respecto es bastante clara: estamos de acuerdo en la creación de espacios marinos protegidos y en el desarrollo de la educación y sensibilidad medioambiental de los practicantes de las actividades subacuaticas:
Todo ello se ha traducido, desde el año 2000, en una actuación por parte de FEDAS tendente a:
Como resultado de todo lo anterior y no sin grandes limitaciones a la hora de responder a todos los proyectos de protección, FEDAS ha efectuado alegaciones y recursos a más de 20 proyectos de Parque/ Reserva en todo el estado español, y ha mantenido conversaciones con el MAPA y representantes de Consejerias de Pesca o Medio Ambiente de Cataluña, Baleares, Andalucia, Comunidad Valenciana, ha propiciado la creación de diferentes asociaciones de defensa de la pesca submarina y, en una cierta proporción de los casos se ha conseguido regulaciones no tan limitadoras de las actividades subacuaticas.
Las principales dificultades en este camino sin retorno son, sin duda ninguna, la heterogeneidad y arbitrariedad en la regulación de la pesca submarina en los diferentes espacios, derivada de la profusión de administraciones con competencias en esta materia, la pasividad o incapacidad de ciertas federaciones autonómicas para tomar iniciativas claras en defensa de sus federados o, en algunos casos incluso para sumarse a las iniciativas de la FEDAS, y la aún baja conciencia medioambiental de buena parte de los practicantes, que en casos minoritarios pero muy publicitados tienen actitudes que dificultan significativamente la defensa de la práctica responsable de nuestra estimada pesca submarina.
El futuro de la pesca submarina pasa por ganarse y merecer el respeto del entorno social, tarea a la que los pescadores,clubs y federaciones aún dedicamos un esfuerzo lejano al requerido por las circunstancias, asumir un cambio de "chip" al entrar en el mundo subacuático y concienciarnos que la sostenibilidad es también nuestra responsabilidad aunque siempre tengamos a quién echarle la culpa.
¡¡¡ No debemos preguntarnos qué puede la pesca submarina hacer por nosotros sino qué podemos hacer nosotros por la pesca submarina !!!
Sergi Pérez
Director de Parques y Reservas de FEDAS.